Mayo 12 de 1914 

La guerra civil requiere dinero para sostener sus oficinas y sus ejércitos; para comprar armas y alimentos. Zacatecas, al mediar el mes de mayo, tiene dos autoridades que se reputan como gobierno estatal.Desde la añeja ciudad minera de Sombrerete se domina esa región y las de Nieves, Jerez y Tlaltenango. Desde la vetusta ciudad de … Leer más

La guerra civil requiere dinero para sostener sus oficinas y sus ejércitos; para comprar armas y alimentos.

Zacatecas, al mediar el mes de mayo, tiene dos autoridades que se reputan como gobierno estatal.
Desde la añeja ciudad minera de Sombrerete se domina esa región y las de Nieves, Jerez y Tlaltenango.

Desde la vetusta ciudad de Zacatecas son dominadas las regiones de Fresnillo, Pinos, Ojocaliente, Juchipila, Villanueva.

Mazapil es controlada por el contingente constitucionalista de Eulalio Gutiérrez.

Nochistlán es vigilada por el gobierno de Aguascalientes. Ocurre esto por la cercanía entre ambas ciudades.

El gobierno de Zacatecas, con autorización del Congreso local, circula desde hace días el decreto 187; en él indica la imposición de una contribución que es adicional y extraordinaria a la tributación que se ha generado con motivo de la guerra civil.

Lo recaudado sería para atender los gastos de la pacificación de la República.

Los encargados de reunir los recursos serían los ayuntamientos.

La imposición adicional y extraordinaria era para todo el estado.

Incluía a las comunidades ocupadas por los constitucionalistas, lo que significaba que no estarían exentas de pago, cuando fueran recuperadas por las fuerzas huertistas.

Signifiquemos: la guerra civil la pagaron los propietarios urbanos y rústicos, y agréguese otro pago por una actividad mercantil.

Imagen Zacatecas – Marco Antonio Flores Zavala