Informes a deber

Los informes de gobierno son una herramienta fundamental en la democracia; informar es un ejercicio de transparencia y rendición de cuentas que exige y requiere la sociedad, que se basa en la Ley, buscando que cada gobernante genere un servicio público de calidad, eficiencia y mayor cobertura, siempre con el compromiso de mejora constante al estado que guarda la administración de la instancia que se representa. 
El uso adecuado y transparente de los recursos públicos en las actividades realizadas durante trienios, sexenios o tiempos determinados, sirven para mostrar avances y comparativos con otras instituciones que se encuentren a la par, así como realizar una buena dosis de autocrítica cuya finalidad es contar con mejores gobiernos.
Hace algunos días se realizaron varios informes de gobierno en los distintos niveles gubernamentales, en varios de ellos, principalmente en los realizados por los presidentes municipales dieron cuenta de los resultados, obstáculos y retos que han tenido durante el primer año de gobierno, algunos de ellos lograron dar cuenta de acciones derivada de la buena gestión, el apoyo conjunto de otras instancias, y algunos otros navegan a la deriva sin proyecto, presupuesto, ni conocimiento. 
Varios de ellos no fueron informes dirigidos a los ciudadanos, quienes son los principales demandantes a la solución de sus necesidades, y es que queramos o no la municipalidad sigue siendo el orden de gobierno más cercano a la gente, aquel que busca cubrir los servicios básicos de acuerdo a como lo marca el artículo 115 constitucional. 
A la ciudadanía le interesa que sus colonias tengan luz eléctrica, luminarias, agua potable, que pase el servicio de la basura y transporte de calidad, no necesitan saber cuantas veces se reunió el cabildo, cuantas visitas hicieron a determinadas colonias o cuantos hermanamientos hicieron con otras ciudades, lo principal es cuantos ciudadanos o familias se beneficiaron con los servicios públicos municipales. 
Se debe recuperar la función de las administraciones municipales. No necesitamos alcaldes que estén preocupados y ocupados en el número de veces que sesionaron, sino que requerimos de presidentes municipales que persigan beneficiar a innumerables familias. Ocuparse en número de reuniones va en debilitamiento de la instancia más cercana y la que debería ser la más fortalecida: la familia.

Imagen Zacatecas – Juan Francisco del Real Sánchez