Pobreza arroja a niños a trabajar durante las vacaciones

ZACATECAS.- Carlos acaba de cumplir 13 años y está a punto de pasar a segundo de secundaria, durante esta temporada vacacional sus primos lo invitaron a trabajar de limpiaparabrisas, mencionó que se suelen poner en distintos puntos principalmente en los semáforos.  “Como salí a vacaciones mi mamá me dijo que tenía que ponerme a hacer … Leer más

ZACATECAS.- Carlos acaba de cumplir 13 años y está a punto de pasar a segundo de secundaria, durante esta temporada vacacional sus primos lo invitaron a trabajar de limpiaparabrisas, mencionó que se suelen poner en distintos puntos principalmente en los semáforos. 

“Como salí a vacaciones mi mamá me dijo que tenía que ponerme a hacer algo para comprarme mis  útiles y hasta unos zapatos nuevos, mis primos dijeron que estar en los semáforos si dejaba y mi mamá me dio permiso”, expresó.

El pequeño dijo que ha llegado a ganar hasta 300 pesos diarios “a veces más, a veces menos”, pues relató que cuando no hay mucho trabajo se dividen el dinero entre sus dos primos quienes son un poco más grandes que él y siempre lo cuidan.

Carlos dijo que no es fácil, sin embargo tiene “que entrarle” para poder seguir estudiando y poder ser alguien en la vida, señaló que el problema más difícil al que se enfrentan él y sus primos al llegar a un nuevo semáforo, es cuando llegan personas mayores con insultos y les piden que se vayan porque ese lugar es su área de trabajo y no hay espacio para más.

Agregó que trabajan desde las 10 de la mañana como hasta las cuatro de la tarde, principalmente en el semáforo que conduce a panteones y tres cruces, pues dijo es donde mejor les va. 
Trabajan por necesidad

Durante la temporada vacacional se puede notar el aumento de niños en los cruceros limpiando vidrios, vendiendo dulces, lavando carros, embolsando mercancía en tiendas departamentales o  extendiendo las manos para recibir unas monedas.

En Zacatecas uno de los lugares más comunes son los semáforos, pues en cuanto la luz se pone en rojo, los pequeños aprovechan para ofrecer sus productos y aunque muchas veces son rechazados, también cabe resaltar que su edad es un factor para recibir una moneda a cambio.

Asimismo, los pequeños aprovechan el Centro Histórico y los restaurantes para vender y cantar alguna melodía a cambio de dinero o muchas veces hasta de comida.

En estos sitios se puede observar infantes de distintas edades que en ocasiones laboran en compañía de sus padres y en otras permanecen totalmente solos realizando los recorridos.

Pese al  riesgo que esto implica, los menores lo único que buscan es juntar un poco de dinero para ayudar a sus familias, pues la mayoría son de escasos recursos, por lo que en vacaciones tienen que ayudar para no quedarse solos en casa.

El DIF ofrece alternativas

Yadira Galván Sánchez, directora del Sistema Estatal para el Desarrollo Integral de la Familia (SEDIF), informó que en la zona conurbada Zacatecas-Guadalupe, se tienen identificados 17 menores que trabajan, sin embargo en temporada vacacional este cifra aumenta considerablemente.

Señaló que el año pasado durante vacaciones la cifra aumentó a 25 pequeños localizados en distintos puntos de la ciudad, sin embargo comentó que para el periodo vacacional actual apenas se están recabando los datos para saber si este número incrementó o disminuyó.

En este sentido, detalló que como parte de las acciones que ofrece el SEDIF, además de invitarlos a retirarse de las calles y ofrecerles diferentes tipo de becas para que puedan seguir estudiando, se les brinda atención médica y psicológica para detectar y tratar cualquier situación de maltrato o pobreza que pudieran tener.

“Para el DIF estatal el tema de clasificar a un pequeño en un riesgo de trabajo infantil es cuando no asiste a la escuela o trabaja en un tema que supera los derechos laborales de los adultos, es ahí cuando nosotros entramos, sin embargo efectivamente en vacaciones se puede ver mucho el aumento de pequeños en esta condición”, expreso. 

Señaló que la estadística que podría ser más preocupante es cuando al momento de regresar a clases, los infantes no reactivan sus estudios. Agregó que muchas de las ocasiones no es que los padres quieran que sus hijos trabajen si no que no tienen donde dejarlos, por lo que tienen que llevarlos con ellos a laborar. 

Asimismo, dijo que cada una de las autoridades del organismo asistencial, tales como trabajadores sociales, psicólogos e incluso maestros, trabajan de manera conjunta para acudir a los lugares donde se encuentran estos pequeños laborando y así poder ayudarlos.

Niños indígenas

Agregó que es en los casos de niños indígenas en los que más batalla el SEDIF para localizar su vivienda y poder brindar algún tipo de apoyo económico tanto a los infantes como a la familia.

 Sin embargo también existen familias que llega a cambiarse de casa para evitar las visitas que realiza la institución, ya que lo llegan a ver como una molestia.

Aseguró que cada uno de los casos es valorado por un grupo de expertos para ofrecer soluciones que beneficien al menor, sin violentar sus derechos, ya que la mayoría de los pequeños son de escasos recursos. 

Galván Sánchez, explicó que con la finalidad de evitar que los pequeños trabajen durante temporada vacacional el SEDIF, ofrece diversos cursos de verano para que los pequeños puedan pasar un rato agradable y así evitar que trabajen o se queden solos en casa.

Imagen Zacatecas – Alexa Montiel