Detalles que hacen diferencia

No recuerdo exactamente la fecha, pero en este mes que está por comenzar entregará la Guía Michelín en nuestro país por segunda ocasión sus reconocimientos. Sin dudarlo es un evento muy positivo no solo para nuestros visitantes, también para la industria gastronómica de México, la cual es factor fundamental para vivir experiencias particulares en nuestro territorio.

Haciendo una retrospectiva, el año pasado la Guía Michelín de nuestro país contó con un total de 157 restaurantes, incluyendo 42 Bib Gourmand, 16 con una estrella Michelín y 2 con dos estrellas Michelin. Le recuerdo porque ya había escrito algo de esto, la selección de la Guía Michelín México 2024 se realizó siguiendo la metodología que la ha hecho tan famosa la cuál toma en cuenta 5 criterios los cuales son: calidad de productos utilizados, dominio de técnicas culinarias, armonía de los sabores, Personalidad de los Chefs expresada en los platillos y la consistencia en el tiempo y el menú en su totalidad.

Previo a la guía, menciono a dos restaurantes que cuentan con dos estrellas Michelín y que están considerados entre los mejores del mundo, estos son el Quintonil y Pujol, ubicados en la Ciudad de México.

Veremos que sorpresas nos trae en le 2025 la guía y esperemos por el bien de la gastronomía y el turismo que nos visita, que se aumenten los nominados. Las cocinas mexicanas siempre han tenido reconocimiento donde su creatividad, calidad y originalidad les otorgan un reconocimiento, mucho mejor que la guía francesa lo refrende.

Que bien por la industria restaurantera, que bien por los beneficios que esto trae a nuestro turismo. Que se den muchas estrellas más. Honor a quien honor merece.

Cambiando de tema, analizaba dos infografías de mi amigo Paco Madrid, la primera revisa la participación de los destinos turísticos mexicanos en el mercado de viajes de nuestros vecinos del norte por vía aérea, donde desafortunadamente y por factores como la vuelta a la normalidad turística del mundo y falta de asientos en algunas de las rutas aéreas, se traduce en una ligera disminución del mercado de los Estados Unidos.

A veces y aunque se quiera ser positivo, es imposible dejar de ver estas variaciones que a todos nos afectan, pero ¿Qué hacer? Considero no se ha tomado en cuenta seriamente nuestra actividad. Se habla de apoyo, se habla de promoción, pero la realidad es que no se cuenta con un esquema para hacerlo ordenadamente.

Pongo como ejemplo este fin de semana en el que se llevará a cabo “la Gran Escapada”, programa anunciado por nuestra secretaria federal donde la campaña del “Buen Fin” se replicó a nivel turístico. Ojalá resulte como se esperaba, pero desafortunadamente el registro para los hoteles fue algo complicado, amén de que uno de los principales patrocinadores de esta campaña, fue una aplicación de rentas de corta estancia.

Nuestra Asociación jamás se interpondrá en el beneficio de los hoteles, pero suena ilógico que desde nuestros mandos federales se juegue con dos caras. Así las cosas, todo es mejorable. Seamos coherentes ya que todo debe estar al margen de la ley.

Si no logramos ponernos de acuerdo los principales actores de esta novela, el camino será aún más difícil. Ojalá nuestra presidenta vea el potencial del turismo y apoye a nuestra secretaria federal para recuperar el terreno perdido.

Finalmente he de comentarle que en la semana tuve una reunión con los secretarios de turismo y economía de nuestro estado y un par de hoteleros con el fin de analizar las posibilidades para mejorar la ocupación en nuestro estado. Logramos aterrizar varios puntos que, si se concretan, favorecerán sin duda al turismo en el estado.

Que así sea, lo importante es refrendar que nosotros lo que queremos es que a Zacatecas le vaya bien para que se refleje en la economía de todos.

Hasta la próxima.