

Rafael Sánchez Andrade.
Estas iniciativas buscan mejorar las condiciones de funcionamiento de los planteles y reforzar la pertinencia de los procesos formativos.
En el primer año de gobierno, los documentos oficiales registran avances en el sistema educativo, particularmente en infraestructura escolar, actualización curricular y acciones de desarrollo profesional docente. Estas iniciativas buscan mejorar las condiciones de funcionamiento de los planteles y reforzar la pertinencia de los procesos formativos, en respuesta a necesidades identificadas de manera recurrente en el sector.
Uno de los avances más visibles es la ampliación del Programa La Escuela es Nuestra (PLEEN) al nivel medio superior. De acuerdo con el Informe de Gobierno, durante el ciclo 2024-2025 el programa entregó 22,048.4 millones de pesos en beneficio de 69,302 comunidades escolares, de las cuales 6,050 pertenecen a EMS.
La priorización de planteles ubicados en zonas de alta y muy alta marginación, así como en comunidades indígenas y afromexicanas refleja un enfoque redistributivo orientado a reducir brechas territoriales.
El Informe de Labores de la SEP enfatiza que el programa no solo atiende infraestructura, sino que también impulsa la participación social, la corresponsabilidad y la toma de decisiones colegiada, lo que contribuye a fortalecer la vida comunitaria de las escuelas.
También se destaca el fortalecimiento del Marco Curricular Común de la Educación Media Superior (MCCEMS). La SEP reporta tres avances principales:
Estas acciones buscan facilitar la movilidad estudiantil, la homologación formativa y la claridad en los perfiles de egreso.
La SEP reporta avances en regularización de plazas, formación continua y fortalecimiento socioemocional:
Los informes también señalan:
Ambas acciones buscan mejorar las condiciones de bienestar en las que se desarrollan las trayectorias educativas.
Los avances del primer año presentan una política educativa que combina infraestructura, currículo y profesionalización docente. Para consolidar estos esfuerzos será necesario asegurar la oportunidad en la distribución de recursos del PLEEN, fortalecer la implementación del MCCEMS en el aula y convertir la formación docente en una estrategia continua y articulada a las necesidades reales de cada subsistema. Con ello, será posible avanzar hacia una EMS más cohesionada, equitativa y centrada en el bienestar y aprendizaje de las y los jóvenes.