
Le Roy Barragán, secretario de Turismo. | Foto: Cortesía.
El Runrún de hoy, lunes 01 de septiembre del 2025.
El reciente récord Guinness alcanzado por las Morismas de Bracho, con 16,701 participantes, es sin duda un motivo de orgullo cultural para Zacatecas. Sin embargo, conviene distinguir entre el esfuerzo de la sociedad y la gestión gubernamental.
Después de más de 200 años de realización ininterrumpida, este logro no refleja una acción extraordinaria de la autoridad, sino la constancia de los ciudadanos. El despliegue gubernamental fue “amplio” en comparación con otros años, pero la asistencia de turistas externos fue mínima; la mayoría de los espectadores fueron familiares de los participantes.
Mientras se celebra este hito cultural, la realidad de Zacatecas en términos de bienestar ciudadano permanece sin récords verdaderamente importantes: no hay avances significativos en generación de empleos, crecimiento económico, disminución de la pobreza o desarrollo turístico efectivo. La ostentación de un evento tradicional no reemplaza políticas públicas que mejoren la vida diaria de la gente.
La cultura es un orgullo, pero el progreso se mide en oportunidades y resultados tangibles. Que los zacatecanos brillen en un escenario no debería ocultar la falta de estrategias gubernamentales que aprovechen esa visibilidad para generar desarrollo real. Celebrar la historia está bien, pero aspirar a récords que transformen vidas sería el verdadero motivo de orgullo.
Ocho días faltan para el IV informe de gobierno
Faltan apenas ocho días para el cuarto informe de gobierno en Zacatecas, y la ciudadanía tiene motivos más que suficientes para exigir honestidad. La disminución de la población y el estancamiento económico son pruebas irrefutables de que las políticas oficiales han fracasado: no se retiene talento, no se atraen inversiones y no se generan empleos dignos.
Mientras tanto, el gobierno se enorgullece de logros simbólicos, como el récord Guinness en las Morismas de Bracho, ignorando que los verdaderos indicadores de progreso —empleo, inversión y crecimiento económico— permanecen estancados.
La obra pública sigue concentrada en la contratación directa del Estado, desplazando al sector privado y limitando cualquier posibilidad de desarrollo local. Zacatecas se encuentra entre los estados con menor atracción de capital, un reflejo claro de la ausencia de visión estratégica.
El cuarto informe de David Monreal no debiera verse como un acto de autoelogio; debe ser un reconocimiento claro de que se le ha fallado al estado. La ciudadanía exige anuncios concretos, políticas que detonen la economía y un compromiso real con el bienestar de quienes han permanecido y luchan por Zacatecas. Ignorar estos reclamos sería prolongar un ciclo de negligencia que ya dura demasiado.
Zacatecas inicia ciclo escolar con preocupante disminución
El ciclo escolar 2025-2026 en Zacatecas inició con la inscripción de 314 mil 175 estudiantes, pero una baja de 25 mil alumnos respecto al ciclo anterior genera preocupación. Esta caída refleja problemas estructurales que van más allá de abrir aulas.
La falta de claridad en las cifras oficiales, que omiten niveles como preescolar o educación especial, siembra dudas sobre la cobertura real del sistema. La disminución en la matrícula plantea interrogantes sobre deserción, movilidad poblacional y rezagos en inscripción, afectando sobre todo a comunidades vulnerables.
Aunque la Secretaría de Educación promete mantener la cobertura, se requieren acciones más efectivas. Replantear estrategias que garanticen permanencia e inclusión será clave para avanzar hacia un sistema educativo más equitativo. El ciclo escolar también inicia en medio de tensiones entre autoridades educativas y las secciones 34 y 58 del SNTE. La falta de atención a problemas laborales y la incertidumbre sobre la federalización agravan el panorama.
Reuniones organizadas por la secretaria de educación, sin participación sindical, para explicar la transformación educativa, reflejan un distanciamiento con las dirigencias. No se han abordado temas clave como jubilaciones, prestaciones y derechos laborales.
Este escenario anticipa un inicio conflictivo, con posible afectación en la comunicación docente y en la calidad educativa. Sin una intervención efectiva, el ciclo arranca marcado por descontento magisterial y tensión política.
Runrunazos
El año pasado, al inicio del ciclo escolar, Sergio Casas, entonces titular de la Secretaría del Bienestar estatal, anunciaba días antes la entrega de mochilas, uniformes, zapatos y cuadernos para apoyar a las familias en el regreso a clases. Aunque después se supo que hubo graves irregularidades en la compra de estos artículos, al menos había una estrategia visible.
Este año, en cambio, el gobierno del estado informó por redes sociales en una estrategia de difusión prácticamente nula, a las 9 de la noche del domingo estaban anunciando que sí habrá apoyos. La actual titular de Bienestar, Benelly Hernández, prácticamente ni se a visto, ni que decir que la de educación.