Silbatinas, lonas y sonrisas medidas

Mineros recibe a Astros de Jalisco buscando cerrar fuerte de cara a los playoffs de la LNBP. Una estrategia clara, con jugadores definidos y objetivos concretos… algo que claramente Carlos Puente está intentando copiar, llenando de publicidad la ciudad capital, como si los votos se ganaran por acumulación de lonas. Spoiler: no es el equipo con más carteles el que gana el campeonato.

Por su parte, los Gambusinos reciben al Calor de Cancún, en una serie que ha dejado tanto que desear como los informes políticos de medio sexenio: mucho esfuerzo, poco resultado y una grada que no termina de convencerse. En ese mismo tono de institucionalidad sin emociones fuertes, Rodrigo Reyes, secretario general de Gobierno de Zacatecas, estado gobernado por Morena, asistió al informe de Miguel Varela, alcalde del municipio capitalino por el PAN. Una postal política que, lejos de polémicas, mostró profesionalismo y civilidad, dos conceptos que últimamente escasean tanto en la política como en algunos cuartos periodos de los partidos.

Y mientras Rayados de Monterrey se prepara para recibir al América con una plantilla llena de refuerzos, en la política local también hay quienes ya están armando su equipo rumbo al 2027. Algunos con figuras recicladas, otros con fichajes sorpresa, pero todos queriendo meter gol aunque el partido apenas va en el primer tiempo. ¿El árbitro? Bien gracias, aún revisando el VAR.

Eso sí, el que sí sintió el ambiente fue el gobernador, abucheado durante la ceremonia del Grito de Independencia. El ruido fue tanto que llegó a los medios nacionales, opacando incluso el marcador del partido. En política, como en el fútbol, cuando la afición grita, algo no está funcionando. Y esta vez, no hubo manera de “torear” la silbatina.
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Entonces… ¿qué hay de nuevo?
Lo de siempre: promesas, porras, pancartas, y una afición que sigue esperando resultados. Solo que ahora, la política también se juega en tiempo extra.