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Usos, beneficios y mitos sobre uno de los productos más comunes del hogar.
El vinagre es uno de los productos más comunes en los hogares, pero también uno de los más subestimados. Se utiliza en la cocina, la limpieza y algunos cuidados personales; sin embargo, existen muchas dudas sobre sus beneficios reales y sus alcances, como si desinfecta, purifica o cuál es mejor: vinagre blanco o de manzana.
El vinagre, conocido químicamente como ácido acético, es el resultado de la fermentación del alcohol etílico a partir de vinos, sidra u otros fermentos naturales. Su proceso le confiere propiedades ácidas que explican muchos de sus usos domésticos y culinarios.
Gracias a su versatilidad, el vinagre es ampliamente utilizado en la gastronomía mundial, la industria alimentaria, la limpieza del hogar y algunos tratamientos estéticos.
El vinagre contiene compuestos antioxidantes, por lo que se le atribuye un papel auxiliar en la prevención del envejecimiento celular y algunas enfermedades crónicas. Diversos estudios sugieren que su consumo moderado puede tener efectos positivos en:
La regulación de la glucosa en sangre
La salud cardiovascular
El control de la presión arterial
La digestión y el metabolismo
Además, su acidez puede ayudar a inhibir el crecimiento de ciertos microorganismos, aunque no sustituye a los desinfectantes médicos.
Entre los principales beneficios asociados al uso del vinagre se encuentran:
Ayuda a reducir la proliferación de algunas bacterias en alimentos
Contribuye a disminuir los niveles de azúcar en la sangre
Puede apoyar la pérdida de peso y la reducción de grasa abdominal
Favorece la salud del corazón y ayuda a controlar el colesterol
Mejora la absorción de algunos nutrientes
Apoya la función cerebral y cognitiva
Además de su consumo en la cocina, el vinagre puede utilizarse para:
Tónico facial (siempre diluido y con precaución)
Tratamiento capilar, aportando brillo y ayudando a equilibrar el pH
Higiene de los pies, para reducir malos olores
Limpieza de frutas y verduras
Eliminación de residuos y olores en superficies domésticas
⚠️ En el caso de la higiene íntima, los especialistas recomiendan precaución, ya que el uso inadecuado puede alterar el equilibrio natural de la piel y mucosas.
Vinagre blanco: Ideal para limpieza y desinfección doméstica por su mayor acidez y ausencia de residuos.
Vinagre de manzana: Más usado con fines alimenticios y estéticos, ya que conserva compuestos naturales y tiene un sabor más suave.
El vinagre no es un desinfectante de grado médico, pero sí puede reducir la presencia de algunos microorganismos gracias a su acidez. No sustituye al cloro, alcohol o productos especializados, pero es útil como limpiador natural complementario.